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Nadir

Jaleo

Parece que una bronca cada día es algo estupendo para mantener despejada la cabeza. Lo cierto que tengo tal batiburrillo de cosas en mente que no sé si hablar del cambio climático o de la derecha española. De la cultura y su decadencia, o de la derecha española. De las libertades a defender, o de la derecha española. De cualquier clase de terrorismo, o de la derecha española. Del guerracivilismo, o de la derecha española. De los derechos humanos o de la derecha española. De la canción social (pobrecito mi patrón piensa que el pobre soy yo) o de la derecha española. De la corrupción, o de la derecha española. De la espantada de la poesía, o de la derecha española. De algo que se parezca a un sistema de valores... o de la derecha española.
Y creo que no voy a hablar sobre la derecha española porque estoy convencido de que la derecha española no necesita manager porque ya se publicita sola. Además, dicen que está profesión tiene su código deontológico aunque el periódico sensacionalista El Mundo no tenga ni idea de que carajo significará deontológico. Se entiende -como diría el mago- que ya hay una propuesta ciudadana para ilegalizar al Partido Popular porque la ciudadanía ni traga, ni confía, ni carece de recursos. Lo cierto -yo no soy jurista- es que en principio la cosa estaría hasta bien fundamentada. Vaya, que tirando de hemeroteca comprobaremos que algunos de los (se me hace cuesta arriba calificar de periodistas a ciertos cantamañanas) alentadores de un nuevo régimen de ultraderecha no sabrían -¡o sí?- que argumentar si un juez decidiera aplicarles, por unos artículos donde se sugiere que la vía del golpe de estado no debe ser descartada, el mismo baremo que a de Juana Chaos. Que quede claro que yo nunca he esperado que los verdugos y colaboradores del Régimen Franquista pidan perdón a sus victimas... y ya ni les cuento sobre la posibilidad de que las indemnicen con sus propios patrimonios o trabajen conjuntamente para restablecer la memoria. Así que, ahí se podía tener hasta más argumento del que esgrime el propio PP en su intento por ilegalizar al PC de las tierras vascas. Yo tengo que decir -pues uno se monta esta cosa llamada blog para eso- que no hemos de obviar que en los textos sobre la Historia de este País se hace hincapié en que la República, y más particularmente la izquierda española subestimó -no en base a la soberbia sino a esa bonhomía que les caracteriza- a los alzados y sus cómplices políticos. Por eso perplejen ustedes lo que buenamente puedan porque que yo me limito a decir lo que malamente piensa muchísima gente. En definitiva, que en España, simplemente, la derecha no existe. ¡! Los desesperados y rastreros ataques de los caudillos del PP al gobierno socialista no evidencian más que la calaña de quienes no consiguen comprender el significado de la palabra democracia. Yo, que conste, siento tales siglas y a sus dirigentes mas como un estigma nacional que como una opción política.

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