Blogia
Nadir

Mira que hay eh?

El temita del pleito insular es un muerto que sacan de paseo de vez en cuando algunos como para buscarle un acicate a la vida, un empuje, un meneíto a su psique morosa. No hay problemas en Canarias por los que protestar. No pasa nada con la caída al vacío de un modelo económico basado en el turismo barato y la construcción. No pasa nada con los problemas de una generación de jóvenes que por primera vez en la historia reciente vive peor que sus padres y a costa de sus padres. No pasa nada con la incultura que nos rodea ni con la mentecatez permanente del canario medio. No pasa nada con los muertos que llegan en cayuco. Ni siquiera pasa nada con los sesenta pibes que están en la cárcel en esos extranjeros del señor por culpa de los juegos con la droga.
Nada de nada. Mira que hay temas por los que preocuparse y por los que montar la bulla. A la lista podemos sumarle la desactivación democrática de la zona capitalina de Tenerife, el espanto que supone el reciente pleno del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, las puñaladas traperas que se dan nuestros despreocupados políticos a cuenta del pacto (¿a quién coño, repito y perdonen, a quién coño le interesa la aprobación o no del Estatuto?), que la Unipol le dé una presunta paliza a otro presunto pibe, que tú también eres sospechoso, que se insulten en otro vergonzoso pleno del Ayuntamiento de Santa Cruz y mil cosas más.
¿Cómo vamos a comparar todo eso con otra vueltita de tuerca al pleito insular? Esos canariones que, amarillos de envidia, contemplan cómo nuestro regio y poderoso tranvía conduce por fin, y cobrando, ciudadanos que de verdad le dan utilidad al trasto y no jubilados y ñoras ociosas que solo hacían bulto para la primera campaña de éxito del chisme. Los canariones que, obviamente, no tolerarán un pacto por la espalda ente Rivero y Soria. Los canariones que tienen una mierda de Roque Nublo y una basura de Dedo de Dios que ya se cayó al suelo, ja, ja, ja.
En fin, y a ver si de paso corrigen del dichoso estatuto y meten que Canarias es una república atroz, tinerfeñista y soberana de raíz atlántica con la isla de Canaria (no confundir con el nombre de la nación) como invitada gracias a la benevolencia nivariense, que le tolera confederarse con el resto de las ínsulas que eligen a la gran Tinerfe como su faro hacia el futuro. Hace falta estar aburrido.

0 comentarios