De Ministros de Interior....y tal

Leo que a Ángel Acebes, ministro hasta anteayer, le parece que en siete días el nuevo gobierno no lo ha podido hacer peor. Y me ha tranquilizado el señor Acebes: si Zapatero nos ha puesto en una semana al borde del precipicio, y el precipicio es esto, no cabe esperar que vayamos a más. Lo que pasa es que yo desde la masacre de Madrid del 11-M no me fío de lo que diga el señor Acebes, y menos de su capacidad de percepción. Por lo cual lo que yo perciba, y muchos españoles como yo, siempre será distinto a lo que perciba Acebes. Muchos ciudadanos están convencidos de que Acebes nos mintió, y él no, con lo cual el concepto de verdad o de mentira varía mucho según seas Acebes o el kiosquero de la esquina. Yo en siete días apenas he percibido que el nuevo gobierno ha puesto las bases para hacer unas cosas bien y otras no. Hay algunas bases indiscutiblemente buenas, y otras, que ojalá salgan bien, pero en las que barrunto dosis de voluntarismo, imprecisión o cierta ingenuidad. Hay que esperar un poco. Pero Acebes no ha querido esperar y se entiende muy bien. No se trata de que lo haga por mala voluntad o por precipitado sino, simplemente, porque no está acostumbrado a hacer oposición ni se había preparado para ponerse detrás de la pancarta que tanto detesta. Y luego está el estado de ánimo: haber tenido tanto mérito en la derrota de tu partido, como le ha pasado a él, es para ponerse de los nervios. Como doloroso debe de ser tener que oír decir a su sucesor ?ayer, en la radio? que en el Ministerio hay que organizar la lucha contra este nuevo terrorismo del exterior porque, a pesar de que las fuerzas de seguridad avisaron, hubo una clara imprevisión política el 11-M. Y eso sí que es grave. El 11-M no llevaba el PP una semana en el gobierno. Ni Acebes una semana en el ministerio del Interior